Reconocido como uno de los tipos de Yoga más suaves y accesibles a todo tipo de practicantes, Kripalu Yoga es una variación de lo que conocemos como Hatha Yoga. En la técnica se pone especial énfasis en la integración del ser humano en un todo, cuerpo, mente y emociones, todas perfectamente complementadas, utilizando como herramientas distintas posturas yoguicas, las cuales se caracterizan por ser moderadas y por potenciar la meditación.

Kripalu Yoga es una técnica cuyo origen proviene de mano del yogui Amrit Desai, quien se basó tanto en las escrituras védicas, como en las enseñanzas hindúes, y en los conocidos sutras de Patañjali, aquellos que nos hablan de los ocho pasos o etapas fundamentales en toda práctica de Yoga.

Kripalu es un término sánscrito que traducido significa compasión, y por ello se suele decir que este estilo de Yoga se encarga de apostar al entendimiento de la singularidad de cada ser humano, honrando a todos y cada uno.

Si debemos hablar de la esencia de esta disciplina, tenemos que decir que la misma persigue un objetivo claro: que cada practicante de este Yoga pueda aprender a estar presente en la experiencia momentánea, con la consciencia plena del simple hecho de estar vivo.

El Yoga Kripalu no es una técnica que se basa sólo en estiramientos y ejercicios respiratorios, sino que ofrece un camino de autoconocimiento, herramientas para permitirse aprender a estar presente en los pensamientos, emociones y sensaciones que conviven en uno mismo.

Por supuesto que esta clase de autoconocimiento que desarrolla el practicante de Kripalu Yoga, ofrece consecuencias positivas, una de las más características en tal sentido, es poder conocer lo que resulta positivo y negativo o nocivo para cada uno. Desarrollando una mayor conciencia de uno mismo, es que podremos comenzar a relacionarnos de manera diferente con nuestro interior y con los demás.

La práctica del Kripalu Yoga no supone un nivel de exigencia física avanzada, sino más bien, se adapta a cada tipo de practicante, y es por ello que resulta una de las técnicas yoguicas más practicadas en al actualidad, dado que está pensada y diseñada para cada tipo de persona, estado de salud y edad.

El Kripalu Yoga establece una práctica basada en el trabajo de la respiración y alineación, esto es lo que se utiliza para alcanzar la meditación y luego la relajación. Por ello se suelen combinar asanas clásicas del Yoga, con el control de la respiración, es decir, pranaiama, logrando poco a poco liberar las tensiones, tanto físicas como emocionales, calmando la mente y dejándola en silencio, acercándonos así a experimentar el espíritu interior en su máximo esplendor. Todo este proceso permite alcanzar la lucidez mental y espiritual, en un cuerpo totalmente relajado.

La práctica del Kripalu Yoga se rige en base a tres pasos. Algo de lo que explicamos anteriormente. Se comienza con el conocimiento del cuerpo y la respiración, practicando las posturas y llevando la respiración a los lugares necesarios para poder concentrar la mente y alcanzar el segundo paso. Este consiste en mantener la postura. En esta etapa, la atención estará fijada en las sensaciones de nuestro cuerpo, luego en los pensamientos y más tarde en las emociones, manteniendo una misma postura durante en periodo de tiempo más prolongado, tratando de establecer una consciencia testigo acerca de la interacción de cuerpo y mente. Finalmente, el tercer paso es llamado meditación en movimiento y nos habla de la energía vital y cómo esta fluye libremente, al igual que nuestro cuerpo que se mueve de manera espontánea, es en ese estado que la mente comienza a presenciar sus propias actividades con mucha más fuerza.

Yoga Kripalu es así una de las técnicas que apuesta al autoconocimiento y a la aceptación de uno mismo, por ello se dice que es el Yoga de la compasión y del entendimiento de la singularidad de cada ser.